Datos & Formulario.

Hotel es la prisión federal de estados unidos, también llamada Undergrand Hotel por los prisioneros de la misma. Este lugar fue construido 30 metros bajos tierra bajo Long Island, siendo así una prisión inexpugnable. El castigo de cada prisionero será dependiendo a lo que hicieran en su vida en el exterior, catalogados entre los tres niveles, desde el mayor hasta el peor crimen cometido, eso sí, cada uno es separado entre sí para evitar problemas con aquellos que sean considerados débiles y los peores catalogados en el mismo. No obstante, entre los prisioneros, siempre habrá uno que sea el más temido, aquel al que hasta los policías temen, y como no, puede que sea el mismo que aporte información al presidente. Estos "mandamás" como mismo los llaman en este lugar, son los que siembran el miedo, sin duda alguna, estos tienen tanta gente a su alrededor que asesinarte, no es trabajo difícil, que hasta un bebé podría hacerlo; asegúrate de tener miedo.

En este lugar domina la jerarquía de cada uno, siendo el primero en la cadena alimenticia el presidente de esta prisión, mismo que es custodiado día y noche por policías que aseguran su seguridad, por lo que es imposible llegar a él. Los policías, aunque estos tengan un rango superior, muchos de estos son corruptos, disfrutan de abusar de los prisioneros débiles, como también, de someter a los de menor rango, como lo sean los guardias de seguridad, hasta los mismos habitantes de UGH (forma de abreviar Undergrand Hotel). Los que entran en este lugar, obligatoriamente tienen que cumplir con su plazo de cadena, para aquellos que sea condena perpetua, no podrán salir nunca de este lugar. Escapar no es una opción, y en el caso de que logren hacerlo, los oficiales, como también, los agentes encubiertos se asegurarán de traerlos de vuelta; recuerden que si llegaron a este lugar, significa que no son el ejemplo de humanidad,

La condena de estas personas puede ser bastante productivo si lo que desean es permanecer aquí y conseguir un empleo de medio tiempo que se da un mísero sueldo, lo suficiente como para comprar un almuerzo promedio al cocinero especial del presidente; conscientemente, estén por seguro que la comida es un asco, que solo sirve para alimentar ratas, queriendo decir que todos los que pertenecen a este lugar como habitantes permanentes no son más que raras de la sociedad. Los oficiales tienen derecho a abusar de cada uno de los prisioneros si tienen el deseo de hacerlo, como también, el presidente da las órdenes para cada uno, mismo que también puede ser el mayor traficante de drogas del lugar.